[ID] Keegan C. Kidelan

Keegan

Ni te atrevas...

27 años

Humana

REINO DE LVNEEL

Nivel 4

Pirata

Femenino

Bisexual

Datos Físicos

Historia

Un, dos, tres, un, dos, tres…
Suena el sonido de los tacones en el salón mientras el maestro golpea el suelo dando el ritmo que he de bailar.
Es tan aburrido escuchar el sonido junto con las palabras mientras intento comportarme como la chica ideal… Ojala alguna vez encuentre esa libertad.

Mis ojos se abren ahora al sol cubriendo con mis manos el fuerte deslumbrar que provoca su calidez. Un poco de luz entra entre mis dedos haciendo que poco a poco recobre la visión para darme cuenta que aún sigo en aquella barca en la cual he escapado.
La cabeza comienza a doler tras la noche pasada donde la botella de ron la dejé vacía a mi lado lo que me hace recordar que ahora necesito algo para disminuir el dolor haciendo que me levante del lugar buscando a mi compañera mientras mi mente vuelve a viajar por el tiempo recordándome por qué ahora estaba aquí.

― ¿Quién lo pensaría? ― Rio por lo bajo mientras la veo a ella, mi compañera de viaje quien duerme cansada sobre mi cama, seguramente se quedó cuidándome otra vez  para cerciorarse que no me dañara yo misma en mi estado inconsciente por el alcohol.  A veces pienso que exagera de más, pero así es ella y yo no puedo cambiar su forma de ver el mundo.
Sonrío un poco mientras estoy recargada en el marco de la puerta mirando la escena para después salir al balcón de aquella habitación, no sin antes pasar por una botella de cerveza y destaparla para beber su contenido bajo los rayos del sol dejando que la brisa del mar golpee mi rostro disfrutando de su sabor y aroma salado.

―Lvneel― Susurro sin mucha importancia. Aquel lugar no me traía buenos recuerdos siendo que toda mi infancia la pase ahí.

“Compórtate como una dama, espalda recta, se femenina, no juegues en la tierra”  Desde que fui adoptada por aquella familia no podía hacer más que acatar órdenes como si  fuera un robot.
No quería ser desagradecida por darme un hogar, pero deseaba más que nadie el poder comportarse como una niña y no como un robot que acataba órdenes, quería solo divertirse y eso no le era permitido.
Mi pésimo comportamiento a ojos de sus padres fueron los que le llevaron en la adolescencia ser envía bajo las ordenes de un amigo cercano de la familia para ser parte de la marina. Quizás de esa forma la chica aprendería a comportarse y sacar su forma bruta, al menos daría prestigio a la familia. Ilusos. Puedo recordar sus caras cuando escucharon por boca de aquel amigo que yo era el peor elemento que habían tenido nunca. Esa vez reí por lo bajo pero mis padres se empeñaron en que yo siguiera ahí, seguramente ya no me soportaban en casa y los entendía, éramos tan diferentes.

¿Qué fue lo que cambio entonces? ¿Por qué terminé formando parte de los marines? Fue fácil, había un chico que me gustaba y que tenía las mismas características que yo, aquel joven era el hijo de quien se suponía estaba bajo su cargo y aunque parecía un elemento excelente, sus ideologías eran revolucionarias.
El engañaba a todos intentando ser el elemento perfecto, pero entre mentirosos nos conocemos y pude compartir su secreto.

El día que nos proclamaron parte del cuerpo de la marina, ese día fue memorable, ambos la traicionamos, él para ser revolucionario y yo, aunque me pidió ir con él, decidí buscar mi camino. Al fin era libre y tenía que hacer algo antes de seguir mi nuevo viaje.  Así llegue a casa de mis padres y robando sus joyas y tomando un rehén salí del lugar para emprender esta nueva aventura.

Lo más gracioso de todo es que aquel rehén no ha sido fácil de dejar, me ha seguido a todos lados y ahora comienzo a preocuparme por ella. Si, aquella chica que duerme es el rehén que tomé para salirme con la mía. No sé por qué me gané tan rápido su confianza pero es bueno saber que en este viaje no estoy sola y ella me acompaña. Me alegro de que este a mi lado.

Gustos

Disgustos

La bebida
Los dulces
La libertad
Reír a carcajadas
Todos los postres
Tener autoridad
El respeto
Ser alagada 

Sentirse impotente
Que la hagan de menos
Mantenerla en un solo lugar
Los compromisos
La gente engreída
Que no le dejen beber
Los climas calurosos
Las cosas picantes
Que todos estén a sus  ordenes
Que le mencionen que debe comportarse más como una chica

Otros Datos

Armas

A veces suele tener ese comportamiento materno con las personas que le rodean.
Tiene un pequeño animal de felpa que esconde bajo su almohada al cual llama Gumi.
Tiene un carácter fuerte incluso con sus conocidos, pero intenta siempre comprender a sus mas allegados, por lo cual nunca esperen que ella se comporte como el cliché femenino.
En su familia es llamada por el nombre de Cassidy, pero al volverse pirata se cambió el nombre para que su familia le perdiera la pista y no ser vinculada con dicha familia.

Medianas de Filo

Michiko Malandro - Michiko to Hatchin