[Pasado]El North Blue Helado.

por Invitado Jue Ene 19, 2017 7:49 pm

La gélida brisa hizo que el delgado cuerpo de Antony se estremeciera. Había escuchado sobre los cambios climáticos en Grand Line pero no pensó que existieran tales cambios en los mares Cardinales, pero ahora ahí lo veía: La Isla Minion; era como una especie de sueño en el que el clima cambia súbitamente pues en aquel lugar, como en una caricatura, el frio estaba concentrado en aquella pequeña y, casi, deshabitada isla. Navegaba en aquella pequeña embarcación, un pequeño barco pesquero que lo había contratado como seguridad durante aquel viaje. El enorme hombre se encontraba en la proa del barco, vigilando como las aguas se movían y buscaban alguna nave que fuera sospechosa, aunque claro, el ambiente estaba bastante tranquilo, desolado a decir verdad, solitario.

La isla, restando la cuestión del clima, era un territorio bastante simple. La población era escasa y el porcentaje de abandono era demasiado, lo cual era bastante llamativo para aquellos que querían encontrar un refugio de las fuerzas de la justicia; un lugar de paz para los criminales, las nevadas eran perfectas para ocultar las evidencias de contrabando o de algún asesinato. Era extraño que existieran ese tipo de lugar, para Antony era bastante común, considerando que había vivido la mayor parte de su vida en la llamada “Ciudad Libertad”; había oído hablar a algunos de sus conocidos sobre sus tratos en aquella parte de los Cuatro Azules, buenos tratos, buenas ganancias.

El desembarco fue calmado. Los pescadores, que no solo se dedicaban a la pesca, sino que tenían una agenda mucho menos legal que la de la captura de peces. Minion era una de sus paradas no tan ortodoxas. Con los ojos atentos alrededor, el moreno vigilaba mientras las cajas eran bajadas con cuidado y colocadas en orden. Antony sabía que no debía preguntar sobre el contenido de aquella carga, en especial considerando que su trabajo era únicamente vigilar que nada pasara durante el viaje de ida y de regreso, solo eso. La pequeña tripulación comenzó a introducir las cajas al interior de la isla mientras que el artillero permanecía cerca de la nave.

Con la vista fija en el horizonte. El trabajo era bastante simple, pero siempre cabía la posibilidad de algún visitante inesperado. Encendiendo un pequeño fuego y alzando el cuello de su denso abrigo. Mierda...El frio si que le calaba los huesos.

por Invitado Jue Ene 19, 2017 8:41 pm

Entre la nieve podía divisarse un joven trajeado con elegantes ropas y de altura promedio. Este hombre conocido como Paradox había sido enviado por el gobierno para vigilar la isla por unos días mientras no tenían tareas mas importantes para el. Realmente hubiera preferido negarse y dejar el trabajo a alguien mas pero cuando a uno le amenazan de muerte es un poco difícil decir que no. Al menos podrían haberse dignado a darle algo de abrigo, el muchacho se estaba helando. Tal vez había hecho algo malo y habían decidido mandarlo “unos días” a aquella isla para que muriera de alguna hipotermia o se lo comiera algún lobo lo suficientemente hambriento para comerse la poca carne que tenia. La peor parte era sin duda lo aburrido de la isla, apenas y había gente con la que conversar. Los habitantes solían ignorarle si tenia suerte, en el peor de los casos podían incluso agredirlo o insultarlo. Una misión horrible en una isla horrible con gente horrible pensaba mientras maldecía su suerte.

Entonces mientras intentaba no ser asesinado por el frio polar el joven pudo observar un fuego. Sin pensarlo mucho se acerco al instante temblando y colocando sus manos lo mas cerca que podía sin recibir quemaduras graves. Al levantar la cabeza pudo observar a otra persona cerca de el. Al parecer se encontraba junto a un barco de pescadores. Estos por suerte parecían no saber que Kuma era un agente del gobierno. Tal vez podría ahorrarse la hostilidad si actuaba amigable-Buenas caballeros. Que frio hace ¿Eh?-Dijo con amabilidad llevando la expresión de siempre. Ojos cerrados y una sonrisa tan amigable como le era posible-Lamento la intromisión pero en serio me estaba congelando. ¿Que tal todo? Veo que están desembarcando-Dijo mientras se acercaba un poco mas al chico-Y dime ¿Que hay en esas cajas?-Susurro para que no le oyeran los demás. Tal vez recibiría una respuesta divertida, tal vez solo fueran peces y nada mas. Al menos tal vez podría tener una conversación libre de hostilidad.

por Invitado Lun Ene 23, 2017 8:20 pm

La helada isla era un lugar bastante solitario, bastante tranquilo pero para alguien en el lugar de Antony, era algo bastante interesante; el helado clima, así como la falta de personas, eran totalmente contrarias a la calida y sobrehabitada Baterrilla, en la que no había un momento en el que uno no viera a mas de 5 personas en su campo visual; Minion era distinto, y en todo el tiempo que llevaba en aquel desembarco, restando a los pescadores, no había encontrando a otra persona. Pronto aquello cambio, aunque claro, esto no cambio al moreno, al contrario, lo puso en alerta. Aquel hombre era curioso: Su cabello, similar al pasto en cuanto a color como en textura, según parecía a la distancia; sus ropas demasiado ligeras para el frio de aquella isla, sin embargo, lo que mas llamo la atención de Antony, fue su rostro, sus facciones, bastante delicadas y alargadas, le recordaban a las de un felino, un gato casero para ser mas exactos, un extraño gato muy ágil y delgado. Y cuando lo vio sonreír, aquella idea simplemente se hizo mas evidente. Los gatos no son de confianza, o por lo menos eso creía el artillero; era mas una persona de perros.

– Bastante. Es extraño ver a alguien este lugar, en especial con tan poca ropa. – Con una vara, el moreno pico las brazas que chisporrotearon con fuerza. Las siguientes palabras de aquel recién llegado, demostraron lo que Antony ya creía: Aquel hombre no era de Minion, lo cual no era demasiado bueno para la misión de traslado -. Considerando que se encuentra aquí sin equipamiento, presumo que no tenía preparado llegar a una isla helada. ¿Qué lo trae a Minion? – Con tranquilidad, el moreno denotaría, falsamente, que él era un habitante. - ¿Las cajas? Lo típico: Un poco de salmón, un par de calamares y una pila entera de camarón. Nada demasiado relevante. – El artillero hablaba con confianza, tranquilidad, vendiendo de manera esplendida la mentira. ¿Quién era aquel hombre? ¿Aliado de los pescadores? ¿Enemigo? A saber pero Antony no podía permitarse dejarlo así. Las cajas ya casi terminaban de ser transportadas, así que simplemente tenía que mantener entretenido al ignoto solo unos minutos. El sentir el peso de su revolver, oculto bajo su abrigo, lo tranquilizo lo suficiente como para no lanzarse inmediatamente sobre el felino.

OFF.- Sorry por la tardanza y el post corto, dias ocupados :V

por Invitado Miér Ene 25, 2017 12:29 am

El joven mentiroso pudo ver como aquella persona parecía mantenerle vigilado ¿Tal vez se estaba metiendo en algo peligroso? Mientras fuera entretenido el caballero no tenia problema alguno. Al parecer no era normal ver a alguien con tan poca ropa y con razón, ya le parecía que no era normal helarse como el en aquella isla. Aquel hombre hablaba algo formal a los ojos de Kuma ¿Acaso era un guardaespaldas o algo parecido? Al menos no estaba en contra de entretener con una conversación al chico trajeado-Oh vine a pasar una lindas vacaciones-Dijo entusiasmado antes de hacer un silencio y mostrar la incomodidad en su cara-O eso se suponía. Vaya isla en la que termine-Agrego mientras escuchaba lo que había en las cajas, vaya respuesta mas aburrida ¿Solo lo típico? Esperaba algo un poco mas divertido aunque dudaba que le dijeran que las cajas tenían armas o algo así sin razón.

Casi como un niño se acerco a una caja que estaba cerca y se arrodillo junto a ella-¿Oh? ¿Y cuanto cuestan? ¿Se puede ver lo que lleva? ¿Puedo?-Dijo con curiosidad como si se tratara de un crió revisando un juguete ¿Porque lo hacia? Simplemente estaba aburrido y quería molestar un poco ¿Que es lo peor que puede pasar? Actualmente muchas cosas que no se le venían a la cabeza al joven peliverde que sonreía con inocencia al aparente guardaespaldas antes de levantarse rápido y dar una reverencia-Maldición ¿Donde están mis modales? Puedes llamarme Paradox ¿Como te llamas tu?-Comento con entusiasmo intentando entretenerse en aquella isla helada.

por Invitado Jue Ene 26, 2017 1:11 am

Extraño sujeto, solo eso podía pensar Antony; era demasiado extraño. Demasiado inocente, demasiado confiado, demasiado curioso. Aquello no era bueno, no era algo que alegrara demasiado al moreno.

– Para sus próximas debería prepararse mejor, iniciando con su destino. A final de cuentas, el mar es un lugar peligroso, no puede andar por ahí sin pensar en sus planes, algo le podría pasar. – Claro, había sido un comentario relativamente casual, pero lo suficientemente agresivo como para demostrar la poca confianza que Antony tenía en aquel hombre. Si bien no conocía aquel mar, ni mucho menos aquella isla pero conocía a un entrometido cuando lo veía, y aquel hombre era un entrometido en toda la extensión de la palabra. Si se trataba de un gato, tan curioso y molesto como un gato.

Poniendose se pie, el moreno siguió la trayectoria del peli verde hacia una de las cajas. No podía permitir que aquel extraño viera el contenido de las cajas. No sabía a ciencia cierta cual era el contenido de aquellas cajas, y no le interesaba, pero sabía que su trabajo era evitar la interferencia de cualquier tipo, en especial si se consideraba la apariencia de aquel hombre. Tenía toda la pinta de ser alguna clase de espía. Ante las preguntas, y al verlo inclinado sobre una de las cajas, el moreno tuvo que actuar de manera rápida. Poniendo su pie en un lateral de la caja, ésta fue empujada un metro, quedando fuera del alcance del felino, por lo menos de manera temporal.

– Lo siento, Paradox. Pero estas cajas son para los pobladores de Minion. No hay mucho por aquí, así que no nos podemos permitir vender a los visitantes, por lo menos de esta manera. Si gusta de comer, puede ir al pueblo, seguro encontrara algo. – Amable, como regañando a un niño, así hablaba Antony. No podía permitir que aquel hombre, o cualquiera, intervinieran en aquella descarga. La mayoría de las cajas había sido tomadas ya, y ahora solo quedaban 5 solitarias cajas a unos 4 metros de donde ellos se encontraban, además de la caja recién pateada. – Soy Trak, y agradecería que no fuera tan entrometido. Somos un pueblo aislado, debe de entender que no vemos a gente de su…tipo, por estos rumbos. – Un comentario casual que intentaba sacarle un poco de información al hombre, así como también intentar ahuyentarlo.

No le quedaban demasiadas opciones a Antony…Aquel tipo era demasiado molesto.

por Invitado Mar Ene 31, 2017 11:26 pm

Kuma dudaba que el guardaespaldas se creyera su mentira improvisada, aunque técnicamente era verdad, le habían mandado a aquella isla porque no tenia nada mejor que hacer, casi como unas vacaciones. En sus palabras se notaba que le tenia poca confianza al peliverde podía incluso ser una amenaza escondida pero al mentiroso le gusta molestar a la gente, ver que tan lejos pueden llegar aunque la mayor parte del tiempo estos hábitos suelen meterlo en serios problemas.

Aunque algo le parecía sospechoso, el guardaespaldas lo siguió cuando se acerco a una caja, incluso puso su pie sobre la que quería abrir y la empujo lejos de el haciendo que Kuma quisiera ver con mas ganas que antes el contenido que llevaban estos supuestos pescadores. El mentiroso se preguntaba que pasaría si seguía presionando, de todas formas podía echar a correr si la situación se salia de control-Vaya, vaya, eso es súper sospechoso señor Trak ¿En verdad sos pescadores? ¿Porque no le venderían un poco de pescado a un cliente con el dinero suficiente para pagar? Uno normalmente le vende a quien quiera ¿No?-El joven seguía con una sonrisa amigable en la cara mientras su mano izquierda estaba en su cintura lista para sacar su cuchillo en caso que fuera necesario, prefería no correr riesgos con aparentes criminales-Sera que...¿Esas cajas en verdad llevan pescado? Solo soy un simple recluta de la marina haciendo su trabajo, es un grave delito interferir con la ley ¿Sabe?-Por supuesto el no pertenecía a la marina, pero de todas formas tenia entendido que trabajan con el gobierno, no pasaría nada por una simple mentira.

por Invitado Vie Feb 10, 2017 1:01 am

Marina, eso era lo único que le importaba a Antony de aquel discurso. Escucho al felino con su entrometida actitud y simplemente se enfureció mas. Así que éste era un perro del Gobierno que venía a inspeccionar las mercancías en busca de contrabando. Su ceño se frunció. No le quedaban demasiadas posibilidades: Ya había cobrado la mitad de lo acordado y la otra mitad, que sería entregada al regresar, la necesitaba para pagar unas deudas de juego. Chasqueo su lengua levemente. Tenía que pensar rápido, aquel hombre no tardaría a darse cuenta de que aquellas cajas contenían material ilegal, cualquiera que éste fuera. Así que a eso se resumía, a un enfrentamiento, había esperado que el trabajo hubiera sido simple pero la presencia de aquel marino complicaba todo. Con una rápida mirada a su alrededor, se dio cuenta de que estaban solos, solo acompañados por el crepitar del fuego. Con un delicada movimiento desenfundo su revolver debajo de su capa, sostendiendolo fuertemente con la diestra mientras que con la siniestra quitaba el manto del frente para que el arma fuera visible a aquel hombre.

– Aquí no nos gustan los Marines, y mas cuando son tan entrometidos como tu. – Apretó el mango del arma; tal vez tuviera una oportunidad de hacer que el hombre huyera, que decidiera que no merecía el riesgo, tal vez no fuera un marino comprometido, sino de aquellos perezosos que a veces rondaban Baterilla, tal vez, solo tal vez, pudiera evitar la pelea y cumplir su trabajo sin ningún otro inconveniente. Con calma, se permitió un instante de negociación.

– Mira…Esto es para nuestro pueblo – Continuo con su mentira -, no puedo permitir que andes husmeando esto, me crucificaran si lo descubren. No quiero pelear contigo, - Un sincero deseo, aunque claro, no porque se tratara de un marino, lo dudaba pero eso era otra cuestión, sino porque seria menos peligroso. – pero no puedo permitir que toques la mercania. Seas o no un Marino, este es mi trabajo y soy un hombre que le cumple con sus obligaciones. – Intentaba aludir al lado temeroso de cualquier humano, incluso un Gato sabe cuando hay que pelear y cuando no. Con un ligero paso hacia atrás, Antony intentaba apartarse un poco del sonriente desconocido, no por miedo, sino para tener una mejor posición en caso de que la negociación fracasase - ¿Qué dices? Ambos podemos salir sin heridas si te vas ahora mismo

por Invitado Sáb Feb 11, 2017 1:35 pm

Parece que el guardaespaldas se había creído su mentira, le sorprendió un poco que no dudara de el cuando menciono que era marine siendo que efectivamente no lo era. Parecía algo enojado como era de esperar, lo que si sorprendió al peliverde fue el revolver que saco de repente-”¿Un revolver? Que aburrido”-En su cabeza se quejaba del arma pues a el no le gustaban mucho, prefería un par de cuchillos o incluso sus propios puños para pelear, el revolver hacia el trabajo demasiado rápido-Ja ¿Un revolver? Eso es bastante aburrido, hacen el trabajo demasiado rápido, no puedes disfrutar mucho-El trajeado comentaba con su típico tono burlón que tantos problemas le había traído, parecía no importarle aquel revolver listo para dispararle pero en realidad el agente estaba al tanto de lo peligrosa que era su situación.

Kuma hacia un esfuerzo increíble para no echar a reír ante las palabras del guardaespaldas, por supuesto el no se creía absolutamente nada de lo que decía aunque en su cabeza admitía que sonaba bastante convincente. De todas formas no planeaba ponerse a combatir contra el, ya se estaba aburriendo y el frio le exigía que buscara mas calor del que la fogata podía ofrecer-Vamos, vamos, no hay porque ponerse violentos. Ni siquiera soy un marine de verdad, me sorprende que no hayas dudado de mi-Su tono era amable pero sus palabras dejaban ver que el agente se burlaba de el-Como sea, no planeo luchar contra ti, ya me aburrí de molestar a las personas del lugar, entonces...si me disculpas-Intentaba dar a entender que planeaba marcharse del lugar, tal vez si no hubiera sacado un arma de fuego Kuma lo hubiera enfrentado para entretenerse un poco, pero las balas no le parecían muy divertidas. Acto seguido se limito a retroceder sin quitarle la mirada de encima al guardaespaldas en caso de que decida disparar prestando atención sobretodo al dedo que tenia sobre el gatillo.

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