G - Guerra Fría (Pasado)

Faina estaba bastante feliz, después de un muy buen tiempo después de haberse unido a la armada revolucionaria por fin tenía sus primeras misiones y podía empezar a hacer algo aparte de vegetar en las bases que le eran asignadas, al menos ahora podía salir, ver otras islas y entretenerse en algo mas que romper los huesos de los compañeros que intentaban molestarla de alguna manera, aunque no podía dejar de admitir que su misión era un poco peligrosa, se trataba de hacer un robo en un lugar plagado de marines y aunque ella sabia que siempre podía escapar simplemente sumergiéndose algunos metros en el agua, estar en tierra siempre la dejaba tan indefensa como cualquier humano por lo que la ponía un poco nerviosa, pero sin preocuparse demasiado por ese nerviosismo y ese temor ya que muchas veces lo había sentido antes de una batalla y sabía que desaparecerá tan pronto entraría en la batalla.
Se dirigió no en barco si no nadando por el océano desde un islote cercano y reviso y memorizo todos los puertos y la situación de la isla como la habían ordenado, llegando un par de días antes que su contacto con quien debía efectuar el robo, ese día finalmente debía reunirse con el así que se dirigió al punto de encuentro pero en vez de esperarlo sobre tierra espio tranquilamente en el agua, queriendo vigilar desde un sitio seguro a quien quiera que llegara a ese lugar sabiendo que podría ser traicionada, algo que le habían enseñado a hacer desde sus días en la isla gyojin, finalmente a la hora de la reunión vio acercarse a alguien rápidamente, por su apariencia no parecía nadie extraño y no parecía estar acompañado de nadie así que se acerco a la orilla tranquilamente saliendo del agua aunque sin bajar la guardia ni un momento y lista para en cualquier momento simplemente tirarse al océano y escapar de ese lugar.
 
-Tu debes ser la persona a quien estaba buscando no es así?
 
Pregunto con una media sonrisa mirando al hombre fijamente, le habían descrito levemente quien era y le habían dado su nombre pero ella no revelaría eso a menos que el hombre lo hiciera primero.
 
-Soy Faina… un placer

El hombre se reporto de inmediato y por lo que dijo sin duda ese era su compañero, a Faina no le preocupo para nada que le dijera eso sobre el atraco de forma tan libre después de todo el sabia lo que hacia al menos si era cierto lo que había oído de el, por lo que se encogió de hombros sin tomar su mano, sonriendo un poco, la verdad es que ese chico no parecía tan fuerte como para sujetarla
 
-Jajajaja ya salgo yo, gracias
 
Salió del agua levantándose estirándose un poco mostrando así su tamaño ya que era mucho mas grande que el chico, escucho eso de tomar un trago, no le molestaba mucho pero había unos pequeños problemas, las escamas de sus hombros y cabeza entraron en su cuerpo dejándola con una apariencia casi totalmente humana, para después tomar mechones de su cabello y escurrirlos uno por uno haciendo sus dos coletas sin dejar de haclar con el hombre, sin preocuparse en secar su piel, solamente se preocupaba por su cabello por que la estorbaba un poco al caminar.
 
-Bueno pero seguro? Creo que destacaría un poco no crees?
 
Le pregunto doblando un poco la cabeza para que el viera sus agallas aunque igual por sus garras y sus mas de 2 metros de altura se notaba que no era alguien totalmente humana, de todos modos quería remarcar eso, se quito una mochila de su espalda forrada de plástico para hacerla impermeable y de ahí saco su bata poniéndosela, esta al menos tapaba la mayor parte de su cuerpo pero no alcanzaba a tapar por completo sus agallas, era muy molesto taparlas.
 
-Pero si crees que no llamare demasiado la atención te sigo… a donde vamos?
 
Pregunto curiosa aunque la verdad solamente tenia ganas de tomar un trago y no le importaba demasiado ser descubierta, en la base de los revolucionarios se había acostumbrado a la bebida y no podía decir que no le gustaba
 
-Y será mejor entonces un sitio privado para discutir no crees? O crees que estaremos a salvo en una cantina?
 
Moría de curiosidad por las respuestas de ese hombre ya que eso era sin duda lo mas interesante que había echo desde que se unió a la armada revolucionaria

Faina sonrió al ver la mirada de asombro del humano, ya que se notaba que pocas veces había visto a una creatura como ella, siempre le había hecho gracia las reacciones que algunos humanos tenían para los seres que eran diferentes a ellos y como ella misma cumplía esa norma se divertía asombrándolos y molestándolos un poco aunque esa vez no tenía esa intención, tal como ella había mencionado, esa vez ser tan diferente era un inconveniente hacia su misión, sonrió un poco al escuchar el comentario sobre sus atributos y prefirió intentar cerrar su bata sin decir nada, aunque levemente roja, una vez que su bata se cerró las escamas de su piel desaparecieron casi por completo dándole una apariencia de una humana común y corriente solo que muy agigantada, quedaban sus agallas pero ella no las taparía por nada del mundo, rio un poco al recibir la aprobación de su compañero
 
-Jajajajaja gracias bueno entonces, esperemos que si esto te parece perfecto para ti sea perfecto para andar por el pueblo… con que vengan de vez en cuando algunos marineros de otras regiones bastara para que no nos molesten tanto
 
Dijo para sí misma la joven, con la bata su tamaño ya no la hacía destacar tanto o a lo menos eso esperaba, mientras caminaban ella empezó a sentirse nerviosa por como el hombre la miraba fijamente, bastante muy fijamente, pensando interiormente que si se le ocurría tocarle algo lo mataría, apenas se fijó en las calles por las que pasaban, pasaron por varias calles y como Faina había pensado mucha gente se fijó en ella pero fuera de decirle algún piropo más o menos decente no pasó nada, lo bueno también de su tamaño es que pocos se atrevían a ir a molestarla, finalmente llegaron al sitio indicado y Faina enrojeció un poco, sobre todo por que como mucha gente la miraba, sabía perfectamente que pensarían si la veían entrar a un motel con ese hombre pero de todos modos solo suspiro
 
-Más te vale no burlarte ni decir nada de esto
 
Le dijo tranquilamente pero sin poder evitar ponerse colorada, en esa isla nadie la conocía y no harían nada más que cumplir con su misión pero igual le daba bastante pena, fue siguiendo al hombre, agachándose para pasar por las puertas e intentando no ver nada alrededor hasta que llegaron a un restaurante, Faina conocía ese tipo de comida, le gustaba pero no creía que en un lugar como ese sirvieran algo bueno igual se sentó
 
-Ammm bueno parece que ya conocías este sitio has venido mucho aquí?
 
Pregunto amable queriendo hacer conversación más que nada porque un camarero se acercó a ellos rápidamente dándoles el menú, Faina apenas lo leyó un segundo y pidió su orden y espero a que su compañero dijera la suya, mientras ella miraba el lugar, este estaba un poco en penumbra, pero estaba un poco vacío, pero no por eso llamaban la atención ya que los clientes que estaban un poco alejados estaban discutiendo algo en voces altas, Faina casi tenía ganas de que se pelearan, algo como eso haría que se fijaran menos en ellos pero no veía forma de provocarlo así que simplemente espero.